16.9.25

Es hora de tener miedo



Si todavía no sienten miedo con lo que estamos viendo en Puerto Rico y el planeta, están tarde. La violencia económica y política que ya está sobre nosotras les encontrará sin los recursos internos para responder y enfrentarla. ¿Les suena catastrófica esta aseveración? Créanme, no lo es.


¿Y por qué hablo de miedo? ¿Por qué no comencé escribiendo sobre la valentía, el arrojo y la integridad que necesitamos para este momento? Porque el miedo es nuestra señal interna de alarma, la que nos deja saber que estamos ante el peligro y la que nos puede impulsar a actuar. 


Hay muchos tipos de miedo y también muchas formas de afrontarlo. El miedo puede ser real o irracional. Puede ser normal o patológico. También puede tener efectos en nuestra mente, nuestro cuerpo y nuestra capacidad de actuar. Afecta la manera en la que nos relacionamos a nivel familiar y social. 


El miedo que deberíamos estar sintiendo en este momento es real. Porque hay una larga lista de eventos y amenazas que afectarán nuestras vidas y nuestro futuro si no respondemos a ellas ahora, de manera organizada y con integridad. Hay que sentirlo a conciencia, observar qué nos provoca y luego, con intención y estrategia, elegir cómo actuar. 


La lista de eventos y amenazas es larga e incluye como característica recurrente la violencia. Algunas cosas parecen asuntos individuales, otras parecen cosas desconectadas de nuestra geografía, algunas más están desdibujadas en la sensación de lejanía que nos provocan los pequeños círculos en los que nos segregamos para no ver, no oír y no sentir al prójimo que es diferente a nosotras. Pero todos esos eventos y amenazas son colectivas y nos incluyen.


Quisiera enumerar aquí esa lista, pero no es práctico. Ya sabemos que leer con atención escritos de más de 350 palabras no es el fuerte de mucha gente hoy en día. Tampoco ver vídeos de más de 90 segundos. Otra forma de anestesiarnos para no sentir miedo y quedar con las mentes aletargadas por estímulos cortos e irrelevantes que nos convierten en presas fáciles de cualquier abusador político. Aun así- y a riesgo de que pasen página y escroleen sus redes más allá de este escrito- mencionaré algunas:


🔔 Una legislatura que TODAS las semanas aprueba legislación que restringe derechos. Eso incluye derechos ambientales, económicos, educativos, de salud, de libre expresión, de libertad de reunión y de protesta, de vivienda, de participación política. 


🔔 Una gobernadora que no solo firma y convierte en ley esos proyectos, sino que usa su poder para mentir, restringir la libertad de prensa y entregar nuestros recursos a capital privado y al ejército de los EEUU.


🔔 Una masa social entretenida con cualquier mosca de chisme, música, moda y muerte que les pase por el lado. Se entretienen y no sienten miedo. Y si lo sienten, lo avasallan con el placer inmediato de las moscas que parecen luces bonitas. 


🔔 Un ejército invadiendo nuestras tierras con el aplauso del gobierno y de la ignorancia colectiva que cree los mitos de bienestar y seguridad que rodean estas invasiones.


🔔 La intolerancia, la demonización y la represión de ideas divergentes que se separan del falso consenso social que nos imponen desde medios de comunicación e instituciones sociales como las iglesias, escuelas y plataformas digitales. 


🔔 Un genocidio en Palestina que es un ensayo para los próximos. Un escenario en el cual Israel, Estados Unidos y otros gobiernos, están probando nuestra tolerancia a la violencia y nuestra capacidad global para defender la vida humana.


🔔 Una despolitización de las causas que eran frentes de batalla en el pasado. Eso incluye el feminismo, el ambientalismo, las luchas obreras, las luchas comunitarias y la defensa de las tierras. Ahora tenemos influencers, organizaciones que tienen las manos amarradas con gobierno y capital y discursos de apoderamiento individual.


🔔 Una capacidad de análisis y discursos cada vez más bajas porque las distracciones tienen la gente de espectáculo en espectáculo mediático y político sin tiempo para reflexionar y atar cabos. 


Si la generosidad hacia la humanidad no nos hace abrazar al prójimo para juntar fuerzas y encontrar los puntos comunes, tal vez el miedo lo logre. Miedo a perder nuestro país, a ver más muertes, a vivir bajo la bota de la violencia de estado que nos quiere imponer cómo pensar y a quienes amar. Sentir miedo a perder la vida- o peor aún- a que alguien amado la pierda. Sentir miedo al hambre y la precariedad. Porque todo eso es posible ya, con el estado actual de las cosas. Yo siento miedo. 


Sentir miedo no es de débiles o cobardes. De débiles, cobardes y mezquinos es encerrarse en una burbuja de entretenimiento y felicidad artificial mientras arde el planeta y nos roban la matria. 

6.11.24

Yo no voy a llorar por Puerto Rico


No voy a llorar por Puerto Rico. Voy a luchar por él.
Esa ha sido mi consigna personal desde hace muchos años y no voy a cambiarla por un resultado electoral adverso.

Sí, el triunfo de Jenniffer es una amenaza a los derechos humanos en el país.
Sí, la mezquindad y el machismo violento de Rivera Schatz representa un estado de agresión constante para todas las disidencias.
Sí, tener a Joanne Rodríguez Veve en el Senado de nuevo es saber que vuelve la agenda de odio hacia mujeres y personas LGBTTIQ.
Sí, el triunfo de candidatos auspiciados por el súper PAC Democracia es Prosperidad representa un cuatrienio de saqueo de nuestros recursos vitales.
Sí, Trump en los Estados Unidos es una amenaza más grande que el PNP acá.
Sí, habrá palos y agresiones en las manifestaciones.
Sí, habrá gente que se quiera quitar.

Pero también...
Sí, los más de 360,000 votos por Dalmau representan decenas de miles de personas despiertas y listas para seguir soñando.
Sí, tenemos aliadas en la Legislatura.
Sí, se lograron conexiones de conciencia y acción que no existían antes de estas elecciones.
Sí, hay gente de TODAS las generaciones puestas para la lucha.

Entiendo y valido el duelo que se siente con estas elecciones.
Pero no podemos darnos el lujo de quedarnos ahí. Tómense el tiempo que cada cual necesite. Es lo justo y necesario. 
Luchar por Puerto Rico es lo próximo en la agenda de quienes le aman.

5.11.24


Esta mañana una esperanza me sorprendió dentro de casa. Estuvo con nosotras todo el día. Tranquila. Ahora en la noche la liberamos. La devolvimos al cielo, al aire, al mundo del que vino.

¿Sobrevivirá la esperanza? Dejarla encerrada era una muerte segura. La incertidumbre del mundo le da una mejor oportunidad que la inmovilidad. Y es una metáfora tremenda de este momento.
Esta noche miro los números, pero también la gente. El trabajo de los pasados meses. Los procesos mentales y emocionales por los que muchas pasamos para llegar a emitir nuestros votos hoy. Nada se ha perdido y nada se perderá.
Tengo claro que aún con Juan en la gobernación, el país que tenemos necesita de mucho trabajo, de mucho más amor, solidaridad y esperanza y de luchar con uñas y dientes para rescatar(nos) el futuro.
Liberemos la esperanza para que Puerto Rico tenga la oportunidad de vivir más allá del pillaje y el abuso de los gobiernos de siempre.
No dejaremos que nos roben el futuro.

25.11.23

Las últimas de la fila

 No recuerdo que alguien me haya dicho de niña que debía ser la última en comer. Pero lo aprendí. De adulta, al cocinar o comprar comida para mi familia u otras personas, me servía al final. Luego de que todo el mundo comiera. A veces hasta comía de pie, a la orilla del grupo. Sin pensar por qué lo hacía. ¿Etiqueta? ¿Bondad? ¿Amor al próximo? No. Aun las feministas podemos ser excelentes alumnas del machismo y ponernos al final de la fila. Ese es el lugar asignado a las mujeres y nos ponemos en él sin pensarlo dos veces.  Las capas de desigualdad son tantas que quitárnoslas de encima nos puede tomar toda la vida. No tienen que decirnos que ese es nuestro lugar, nos lo enseñan día a día, desde nuestra infancia, con los ejemplos que nos dan otras mujeres, con las críticas que escuchamos hacia las que se rebelan o con las miradas de reprobación cuando nos pasábamos de la raya. 

La gente nos mira con aprobación cuando caminamos solitas y sin que nadie nos mande al final de la fila. No solo cuando nos quedamos sin comer. También cuando nos privamos de descanso para asumir la carga mental de la casa. Cuando renunciamos a nuestras carreras y activismo para cuidar crías o personas viejas. Nos dan palmaditas a la espalda y nos reconocen porque hacemos lo correcto. “La familia es primero”, como si nosotras fuéramos un apéndice de la familia y no una persona que merece también ser la primera.

Cuando vamos al mundo público, también hay una expectativa- en las derechas y las izquierdas- de que nos pongamos al final de la fila. A veces de manera literal en las interminables asambleas donde tenemos que escuchar por horas las peroratas de los hombres que todo lo saben, que se sienten como pez en el agua filosofando sobre política y que tienen todo el tiempo del mundo para turnos de micrófono porque claro, hay alguna mujer cuidando su casa, su familia, su agenda, su dieta y hasta su imagen. 

Las filas en los micrófonos son como las de nuestros derechos. Si los reclamamos somos impacientes, si levantamos banderas rojas frente a amenazas somos egoístas, si no pedimos permiso para hacer lo que creemos necesario somos tercas y nos merecemos no solo estar al final de la fila, sino quedarnos solas con nuestras luchas personales o políticas al hombro. “Bueno que les pase por querer colarse en la fila”. 

Ser las últimas de las filas de la vida es lo que nos mata. 

Ser las últimas de la fila de la educación, del descanso, de la salud, de los empleos dignos, del techo seguro y de la participación política nos hace invisibles. Es lo que le resta valor a nuestro tiempo y a nuestros sueños, lo que nos deja pobres. Lo que sostiene la división sexual del trabajo.

Ser las últimas de la fila es lo que le regala el mundo a los hombres y los pone en el centro de todas las decisiones públicas, las decisiones familiares, las decisiones sobre lo que es apropiado que nosotras reclamemos y hasta en las decisiones sobre nuestros cuerpos.

¿Qué mayor violencia hacia nosotras que mantenernos al final de las filas de la vida? Sea por ignorancia o por ideología, es violencia y ya no deberíamos tolerarla.

Un día como hoy es un día político. Para señalar estas violencias. Para empezar a mirar a quienes a nuestro alrededor mantienen una estructura social que es feminicida y profundamente desigual. 

Si vamos a llorar a nuestras muertas, hagámoslo con rabia. Con rabia y determinación. La pena no salva vidas. Las luchas feministas sí. 

Pd. Hoy es el Día Internacional de No Más Violencia Contra las Mujeres. Mujeres. Quitarnos del nombre del día para hablar de violencia de “género” también nos pone al final de la fila. Ahora también los hombres se cantan víctimas de la violencia de género. Los primeros de la fila…


#25N #NoMásViolenciaMachista #nomásviolenciahacialasmujeres

18.11.23

¿Para qué quieren el voto de las mujeres?

🔥 Si el PPD y Proyecto Dignidad quieren el voto de las mujeres deben ser honestos y decirles para qué lo quieren. Proyecto Dignidad postula una mujer a la Comisaría Residente pero van contra los derechos humanos de todas nosotras. No reconocen que existe la violencia machista y obstaculizar legislación y proyectos que podrían erradicarla. 

¿Para P. Dignidad tampoco reconoce la desigualdad por sexo y aboga activamente en contra de derechos adquiridos. Van tras el voto de las mujeres y el mensaje oculto es “dennos su voto para volver a ponerlas en su lugar”. Sin una agenda feminista, no es honesto al pedirnos el voto.

Por su parte, el PPD presentó varias de sus candidatas y habla de inclusión. Pero en la misma conferencia de prensa la candidata Sol Higgins se identificó como conservadora 🙄. El sector conservador tiene una agenda CLARA en contra de los derechos de las mujeres.  El PPD es el mismo partido que alberga senadores y representantes que se expresan en contra de la equidad, que votaron para restringir el derecho al aborto y que hacen alianzas con el PNP y PD para colgar proyectos que las mujeres necesitan. 

Senadores del PPD obligaron a retirar la nominación de  la Procuradora de las Mujeres que fue apoyada por las organizaciones defensoras de derechos humanos de las mujeres. 🤷🏽‍♀️Y luego hacen una ensalada de candidatas, hablan de inclusión y nos piden el voto. 

Los partidos que quieran los votos de las mujeres en el 2024 van a tener que esforzarse un poco más. Tenemos memoria histórica y también les estamos llevando el récord. No basta con presentar candidatas mujeres, deben comprometerse con la equidad. Y esas candidatas, si no son capaces de abrazar una agenda de equidad, paz y desarrollo para las mujeres no nos hacen falta. Estorban. 

#Elecciones2024 #PPD #ProyectoDignidad

11.6.23

Influencer o Defensora de Derechos Humanos

 No se puede querer ser celebrity o influencer y defensora de derechos humanos a la misma vez.


No se puede querer quedar bien con todo el mundo y ser defensora de derechos humanos a la vez.


No se puede ir tras la aprobación social y ser defensora de derechos humanos a la vez.


No se puede ir por la vida tras premios, reconocimientos y palmaditas en la espalda y ser defensora de derechos humanos a la vez.


Porque defender derechos humanos implica pensar con cabeza propia, cuestionar, incomodar, retar y estar dispuesta a aguantar el rebote porque lo que te da fuerza es saberte fiel a tus principios y tu conciencia. Lo que te impulsa es la sed de justicia. Lo que te inspira es pensar en un mundo donde cada cual reciba lo que necesita y aporte lo que sus circunstancias le permitan aportar. 


Ojalá hubiera menos activistas y más personas defensoras de derechos humanos.

31.3.23

Una Procuradora de verdad



Así estuvo y así seguirá Vilmarie Rivera Sierra: Rodeada de las organizaciones de mujeres. De ahí vino, por ellas fue apoyada y por ellas seguirá siendo apoyada y querida. Ahora más, que sabemos lo valiente que puede ser y cuán dispuesta estuvo a someterse a un proceso lleno de machismo y de un conservadurismo avaricioso que insiste en gobernar a garrote y fuerza por encima de todos nuestros derechos.


Vilmarie fue la primera Procuradora de las Mujeres que cumplía con los requisitos de ley para el puesto en más de una década. También es la primera que desde el 2009 contó con el apoyo de organizaciones de mujeres y de otros sectores sociales identificados con la justicia social. Vino desde el servicio para continuar sirviendo y estaba dispuesta a asumir la difícil tarea de levantar una OPM que fue desmantelada por tres procuradoras previas que nunca entendieron sus deberes y que estaban casadas con partidos políticos.


Su nombramiento fue retirado alegando que no habían los votos. Lo que no había era valentía y decencia en el Senado Puerto Rico. Un presidente endeble, una delegación PNP incapaz de pensar por sí misma y sujeta a guerras internas mientras corren tras el espejismo de un supuesto voto cristiano, un grupo de populares buscando cómo bajar al nivel del PNP y una conservadora que- sin creer en lo que predica- se trata de vender como la defensora del patriarcado más putrefacto y misógino que se puede concebir en este momento. La cobardía es tanta que no se atrevieron a llegar a la votación. Esa es la estrategia con nombramientos de gente decente, no dejarlos llegar a votación para no dar cara y ni aparecer en el récord legislativo retratados como los odiantes de mujeres que son. 


Luego en el 2024 todos vendrán a pedir el voto de las mujeres. Y el Gobernador tratará de sacar como carta de presentación el Estado de Emergencia y todos, todas y hasta el gato cruzarán los dedos para que nosotras hayamos olvidado.


Pero no olvidaremos la violencia que ejercieron contra Vilmarie, las mentiras que dijeron sobre ella, los ataques a otras feministas y la manera en que sacrificaron a las mujeres de este país para salirse con la suya.


A Vilmarie la rechazaron precisamente porque venía a hacer bien su trabajo. Macharranes y sirvientas del patriarcado, al menos tengan la valentía de decirlo de frente. Digan que no le querían dar el voto de confirmación porque para ustedes las mujeres no valen nada. A ver cuánto les cuesta la honestidad. 


Gracias, Vilmarie, por dar lo mejor de ti por las mujeres que habitan este archipiélago llamado Puerto Rico. 


#Procuradora #OPM #unaprocuradoraparatodas

Es hora de tener miedo

Si todavía no sienten miedo con lo que estamos viendo en Puerto Rico y el planeta, están tarde. La violencia económica y política que ya est...